"Al encontrarnos en una sociedad donde aún se hace difícil validar ..."
Al encontrarnos en una sociedad donde aún se hace difícil validar las emociones y reconocer la importancia de nuestra salud mental; palabras como “Depresión”, “Bipolaridad”, “Manía” se expresan de manera frecuente e indiscriminada; al punto tal de tender a usarlas sin ningún tipo de filtro o empatía como etiquetas o adjetivos que definen comportamientos “extraños, cambiantes e intensos” en las personas. Por tal razón, el presente escrito tiene como objetivo favorecer un mayor conocimiento sobre el TRASTORNO BIPOLAR, al ser una de las condiciones mentales actuales más complejas de diagnosticar e incluso de transitar para quienes las padecen y para quienes acompañan del otro lado.
o Hablemos de sus causas
Pese a que los estudios científicos refieren que existe un peso importante desde lo genético, no se conoce la causa exacta de esta condición. Sí se han identificado algunos factores que pueden influir en su aparición, tales como la exposición a eventos traumáticos o estresantes en la vida y la presencia de cambios que pueden darse en nuestro cerebro. Estos estudios también plantean la dificultad para su diagnóstico, ya que muchos de los síntomas pueden parecerse a trastornos relacionados con la ansiedad, depresión, psicosis; o a su vez; estar presente de manera latente en otras situaciones problema como el abuso de drogas y alcohol, la presencia de enfermedades cardiacas, tiroides, trastornos de personalidad, entre otros.
o Entonces, ¿Cómo podemos detectarlo?:
Mediante la presencia de síntomas que involucren cambios de ánimo y de comportamiento extremo y fluctuante, es decir, que puedan ir de un polo a otro; conocidos como episodios anímicos. A continuación se explican 3 de ellos:
- Episodio maniaco: Caracterizado por síntomas como euforia, irritabilidad, mucha energía; generalmente poco sueño; conductas impulsivas como gastos de dinero o compras de manera desenfrenada, relaciones sexuales poco seguras, presencia de muchos pensamientos sin control (Rumiación), verborrea (Hablar sin parar), e incluso, acciones que busquen hacerle daño a otro o a sí mismo (Intento suicida o suicidio propiamente dicho)
- Episodio depresivo: En éste la persona tiende a sentir mucha tristeza, desesperanza, inutilidad; también hablar muy lento, tener poca energía, dormir más de lo esperable, mostrar poco disfrute, y en muchas ocasiones manifestar pensamientos o deseos relacionados con la muerte.
- Episodio mixto: Incluye síntomas maniacos y depresivos.
o Ahora bien, ¿Puede ser tratado?:
Este trastorno requiere la presencia de profesionales de salud mental que acompañen al paciente y a su núcleo más cercano a educar y concientizar sobre esta condición y encontrar herramientas para sobrellevarla de la mejor manera posible. Por ende, es fundamental la participación y adherencia a tratamiento psiquiátrico, ya que se ha comprobado la efectividad de psicofármacos en la mejoría sintomática; claro está que manteniendo controles frecuentes y respetando las indicaciones propuestas dentro del plan farmacológico propuesto por el especialista, según cada caso.
De igual manera, se sugiere la asistencia a psicoterapia al ser un espacio que permite:
- Promover en la persona recursos de afrontamiento, una vez logre asumir esta condición
- Identificar conductas de riesgo, anticipando crisis o episodios mediante la autoobservación (registro de pensamientos, emociones, patrones en el sueño y en la conducta).
- Implementar paulatinamente cambios y adquirir nuevos hábitos, más saludables (Tales como ejercicio físico, meditación, higiene del sueño, propuesta de metas realistas y una rutina que conecte más con el disfrute).
Igualmente se debe apuntar a movilizar todas aquellas redes que contengan y ayuden a la persona que padece este trastorno; no sólo familiares, amigos, compañeros de trabajo; sino también se podría incitar a conocer y compartir experiencias con otras personas que padezcan esta afección mental (Grupos de apoyo); al ser evidenciada como una herramienta terapéutica útil en muchos de los casos.
o Para finalizar, no olvidemos que…
Un diagnóstico a tiempo y buscar ayuda profesional son aspectos claves para limitar el impacto de este trastorno, al igual que continuar trabajando para que su diagnóstico NO estigmatice ni defina a una persona; pero sí visibilice cuánto afecta su cotidianidad y su salud integral.
Carolina Trujillo Rodríguez
Psicóloga Clínica
Sucursal Santiago Centro y Terapia Online
Centro de Terapia del Comportamiento
Centro de Terapia del Comportamiento
*Importante: Si te encuentras en una situación de emergencia, crisis o riesgo vital debes acudir al recinto hospitalario más cercano. Terapia Online no atiende este tipo de situaciones.